Una evaluación neuropsicológica es una evaluación que utiliza pruebas de la función cerebral para evaluar la capacidad de pensar, razonar o recordar. La neuropsicología es un área de la psicología que estudia la relación entre los procesos mentales y la estructura y función del cerebro humano. Durante la evaluación neuropsicológica se miden habilidades cognitivas, tales como el aprendizaje verbal, la memoria o las funciones ejecutivas, como la toma de decisiones y la resolución de problemas. La evaluación neuropsicológica también busca evidencia de patología cerebral subyacente. Los neuropsicólogos diagnostican y tratan a personas con trastornos neurológicos como accidentes cerebrovasculares, traumatismos, enfermedad de Parkinson, tumores cerebrales o epilepsia. También evalúan el funcionamiento cognitivo en pacientes con sospecha de demencia u otros.
Los psicólogos cognitivos han tenido en cuenta los desarrollos históricos de la neurociencia en lo que respecta a los mecanismos de evaluación. Se puede ver que las evaluaciones neuropsicológicas se cohesionan en torno a tres principios básicos: (1) se basan en variables observables integradas en acciones y comportamientos incorporados; (2) se basan en la investigación empírica; y (3) están basados en datos. Un modelo de evaluación neuropsicológica es el modelo neuroconductual que se centra en los aspectos cognitivos, conductuales y fisiológicos del funcionamiento de una persona. Este modelo se ha aplicado a menudo a personas con lesiones cerebrales o trastornos neurológicos. La evaluación neuropsicológica no difiere de ningún otro método de evaluación psicológica en su teoría subyacente; sin embargo, tiene diferentes objetivos que los métodos de prueba tradicionales, como las evaluaciones de personalidad o pruebas de inteligencia.
